Se acaba el estado de alarma y con él las normas y restricciones impuestas para evitar la infección por el coronavirus. Ahora, salvo la regulación del uso de las mascarillas y el control de aforos, el resto de medidas de precaución quedan bajo la responsabilidad individual. Todos somos responsables pero ¿sabemos qué debemos hacer para protegernos?
¿Sabemos cuáles son las medidas más efectivas para evitar la infección por coronavirus?
Es probable que no, teniendo en cuenta que las recomendaciones y consejos han ido cambiando casi diariamente. De “las mascarillas no son necesarias” hemos pasado a “las mascarillas son obligatorias”. De los niños son los “grandes transmisores” al “no parece que tengan tanta importancia en la transmisión”. De una distancia de seguridad de al menos 1 metro, a los 2 metros de las últimas semanas, hasta el metro y medio en que ha quedado finalmente fijada.
Pero todo esto tiene una explicación. Al tratarse de un virus nuevo, al principio de la pandemia no se sabía gran cosa sobre su mecanismo de contagio y las medidas más efectivas para evitarlo. Muchas de las recomendaciones se hicieron basándose en lo que se conocía de la transmisión del virus de la gripe, por ser también un virus respiratorio y de los anteriores coronavirus, por su similitud en cuanto al virus en sí. Pero con el tiempo se han ido viendo sus peculiaridades y los mecanismos de protección que son más efectivos.
Recientemente, el CDC, el Centro de Control de Enfermedades de Estados Unidos, publica un resumen de todo lo que se sabe actualmente sobre el tema y las recomendaciones actualizadas para evitar la infección.
Distancia social y mascarillas
Sabemos que las personas enfermas expulsan el virus al respirar, pero no solo los enfermos. También muchas personas que tienen el virus pero están asintomáticas o aún no han empezado con los síntomas típicos. Eso hace que el contagio sea tan fácil, porque mucha gente no sabe que está eliminando el virus y sigue haciendo su vida normal y contagiando a los demás. Pero para contagiarse hay que tener contacto con una cantidad suficiente de partículas del virus que se estima deben ser al menos unas 1000. Y no todas las actividades de riesgo son capaces de transmitir esa cantidad. Por ejemplo al respirar se expulsan unas 20 partículas virales por minuto, cantidad que asciende a 200 si hablamos. Como esta cantidad depende del tiempo, no es lo mismo sentarse junto a alguien sin hablar que intercambiar un par de frases o charlar durante horas. También sabemos que la cantidad de partículas virales se multiplica hasta 200 millones durante la tos o el estornudo. Por eso sigue siendo fundamental toser en el antebrazo o el codo y evitar el contacto con otra gente si hay síntomas.
Conversar supondrá más riesgo si no mantenemos la distancia, si no usamos mascarilla o la usamos mal (sin cubrir bien nariz y boca) y si estamos en un ambiente cerrado y mal ventilado, además del tiempo que pasamos con la otra persona.
Para charlar, siempre con mascarilla, manteniendo la distancia, preferiblemente al aire libre y cuanto menos tiempo mejor (hasta 4 minutos)
Lavado de manos frecuente
También sabemos que el virus se deposita en superficies y que puede permanecer en acero inoxidable durante 48 horas, en plástico 72 horas y hasta 2 días en madera, ropa o vidrio.
Por eso es importante el lavado de manos frecuente y utilizar guantes al hacer las compras.
Pero el riesgo de transmisión desde las superficies es muy bajo. El virus se inactiva pronto al quedar expuesto a la radiación solar, por ejemplo y aunque se han encontrado partículas virales en distintas superficies, incluso en aguas residuales, es muy proco probable que sean capaces de producir infección.
El riesgo de transmisión de infección por contacto con superficies es muy bajo en exteriores e intermedio en interiores. Al hacer las compras, reducir el tiempo y mantener las medidas de higiene disminuye el riesgo.
Planifica las compras para ir lo menos posible, una sola persona por familia (no lleves a los niños, salvo que sea imprescindible), usa guantes si te lo piden, mascarilla siempre y lávate las manos con frecuencia.
Al final, lo que aumenta el riesgo de contagio es la proximidad con otras personas, la falta de ventilación y el tiempo que pasamos reunidos. Eso hace que los lugares con más riesgo sean los sitios donde se agrupa mucha gente para pasar mucho tiempo, y más si están interactuando entre ellos. La escuela, el trabajo, actividades de ocio en interiores como restaurantes, bares, cines, conciertos o fiestas son los lugares donde pueden surgir brotes.
Estas situaciones se deben evitar lo más posible y cuando sean inevitables, mantener las precauciones de mascarilla, higiene de manos y distancia social.
Hablaremos en unos días de cómo afrontar la vuelta al cole, pero de momento vamos a disfrutar de las vacaciones eligiendo actividades al aire libre, manteniendo las precauciones sobre todo en los contactos con los abuelos y limitando al máximo las actividades en entornos cerrados o muy concurridos.
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Fuente: https://www.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/prevent-getting-sick/how-covid-spreads.html
Entiendo que haya que tomar precauciones… Pero creo que vamos a acabar cayendo en la paranoia o TOC con todas las pautas que hay que seguir para cualquier cosa… :/ Ojalá se pueda volver a la normalidad real en algún momento. Porque esto nos tiene a muchos muy tensos, y al final, pues socializas menos (aún).
Tienes toda la razón, Taisa. Los niveles de estres que está provocando esta crisis nos afecta a todos, pero a personas especialmente vulnerables puede resultarles aún peor. Esperemos poder salir pronto.