La tos ferina ha disminuido drásticamente gracias a la vacunación, pero siguen apareciendo casos porque es habitual que se produzcan brotes epidémicos cada 3-5 años. La inmunidad (tanto la natural por haber pasado la enfermedad como la adquirida por la vacuna) va disminuyendo con el tiempo por lo que no es raro que se produzcan casos en adultos.
En el adulto puede cursar como un catarro un poco mas prolongado de lo habitual, y como el periodo de contagiosidad es máximo durante la fase catarral, en la que simula un simple resfriado, es fácil trasmitírsela a los mas pequeños de la casa, que aún no están inmunizados. Los menores de 6 meses, que no han recibido aún las 3 dosis de vacuna, pero sobre todo los menores de 2 meses, son los mas vulnerables, y donde se dan los casos mas graves, incluso letales.
Actualmente se dispone de una vacuna combinada con la del tétanos, denominada de baja carga antigénica o Tdpa, capaz de inducir una protección mas duradera, incluso en adultos, por lo que, si tienes contacto con niños (hijos, nietos, sobrinos, alumnos), deberías administrarte esta vacuna para ayudar a protegerlos de esta grave enfermedad. También está indicada en embarazadas a partir de las 20 semanas de gestación y en lugar de la clásica DTPa de los 6 años de edad, con un refuerzo a los 14 años (en lugar de la del tétanos).
Si quieres saber mas,
http://vacunasaep.org/profesionales/enfermedades/tos-ferina